Las Mejores Anécdotas en 35 Años de la Era Moderna
Las Mejores Anécdotas en 35 Años. ¿Te Acuerdas?
Contra todo pronóstico, la Carrera regresó en 1988, y desde entonces, se ha convertido en un evento histórico como parte del folclore del automovilismo, tanto mexicano como internacional.
Hemos vivido miles de historias entrañables, anécdotas que se han quedado grabadas en la memoria de la familia Panamericana. Te queremos compartir algunas de ellas, en honor a la celebración del 35 Aniversario de nuestra etapa moderna ¡Recorramos juntos este breve viaje en el tiempo!
Alain de Cadenet vive la calidez del pueblo mexicano
La Carrera Panamericana, siendo un total éxito en su regreso, corría la tercera edición en 1990, la cual marcaría un momento importante en la vida de varios pilotos. Este año es recordado, ya que Europa volvió a demostrar su dominio, al ganar en 3 de 4 categorías, mostrando la capacidad de los equipos europeos.
Alain de Cadenet en La Carrera Panamericana
La dupla ganadora de aquella ocasión estuvo conformada por los británicos Alain de Cadenet y Gordon Currie, al mando de un Jaguar C-Type. Una de las grandes anécdotas, tiene como protagonista al inglés Alain.
Resulta que, a la llegada a Tehuacán, Puebla no había habitaciones disponibles para los mecánicos del equipo y fue cuando Alain decidió dejarles su habitación para que pudieran descansar. El líder de la prueba, deseoso de un lugar donde descansar, Alain aceptó contento la invitación de una humilde familia para pasar la noche en su casa.
De esta forma el piloto tomó una ducha en la casa de sus anfitriones preparándose para descansar, la familia contenta de tener a esta leyenda de La Panamericana le ofrecieron de cenar frijoles con tortillas de comal y café de olla disfrutando de la experiencia que estaba viviendo. Esa noche la pasó cómodamente en un catre.
A la mañana siguiente, al despertarse, Alain se mostró preocupado ya que no veía su Nomex y sus cosas, pero la familia había colgado y preparado las cosas del piloto para que estuviera listo para la competencia. El británico se presentó a la línea de salida perfectamente desayunado, bañado y rasurado.
Pero la mejor parte de la historia es que el piloto llegó en el triciclo del anfitrión de la casa en donde vendía tamales, pese a no hablar español y la familia al no saber inglés, Alain de Cadenet confesó haber pasado esa noche como una de las experiencias más maravillosas de su vida.
Nick Mason y David Gilmour, leyendas de la Música en la Panamericana
La música y el automovilismo siempre han sido una fuente mutua de inspiración. Varios músicos han tomado gran afición por los autos, algunos han creado piezas musicales inspiradas en carreras y autos, pero muy pocos hay llevado su pasión al siguiente nivel: participar en una carrera de autos.
El Lancia Aurelia B20 GT
Este es el caso de Nick Mason, quién acompañado de David Gilmour, ambos integrantes de la legendaria banda inglesa Pink Floyd, participaron en la Panamericana en 1990.
Frente al volante, el baterista Mason, respaldado por Guy Edwards, expiloto de F500, llegaron a la meta en octavo lugar sobre un Lancia Aurelia B20 GT.
Portada del documental “La Carrera Panamericana” de 1991
Sin embargo, la aventura finalizó para el Jaguar MK2 conducido por Gilmour y su copiloto O’Rourke, al sufrir un accidente donde el representante de la agrupación sobrevive con una fractura de pierna, mientras que el guitarrista, solo se llevó unos cuantos rasguños.
La pasión por este deporte extremo, quedó plasmada en el documental “La Carrera Panamericana”, que presentaron en 1991, donde se narra la esencia de este evento motor a través de imágenes que se acompañan por pistas instrumentales; se trata de las primeras composiciones del fallecido tecladista Richard Wright, de 1975 y de Mason, de 1973.
¡Un vochito en la Panamericana! El Oaxaqueño en 1992
En su quinta edición, en el año de 1992, el júbilo del automovilismo deportivo creció en Oaxaca, con la primera participación de una tripulación oaxaqueña, integrada por el piloto Jorge Reyes y el navegante Alberto Magaña a bordo de un Volkswagen Sedán con el nombre de El Oaxaqueño.
Alberto Magaña adquirió el famoso vochito, nombre con el que los mexicanos nombramos a unos de los autos más emblemáticos de la historia. Su afición por el automovilismo deportivo y el resurgimiento de La Carrera Panamericana, fueron la inspiración para convertir un Volkswagen Sedán modelo 1954, en un bólido panamericano.
El Oaxaqueño en 1992
Mucha gente pensó que estaban locos, pero nada detuvo a esta intrépida dupla oaxaqueña y a este famoso vocho, El Oaxaqueño, que siguen siendo recordados, cariñosamente, hasta la fecha.
Stig Blomqvist, demostraba su poderío como rallista en 2009
En este año, un total de 90 tripulaciones de 14 países diferentes, se dieron la tarea de recorrer 3,600 kilómetros durante las siete etapas de la competencia.
Uno de los visitantes destacados, en el mundo del automovilismo, fue “Stig” Lennart Blomqvist, un piloto de rallyes sueco, ahora retirado. Blomqvist ganó el Campeonato Mundial de Rallyes en 1984, subcampeón en 1985. A lo largo de su trayectoria mundialista logró 11 victorias y 33 podios.
Stig Blomqvist campeón 2009
Suecia logró el 1-2 en la edición 2009 de La Carrera Panamericana, donde Stig Blomqvist se llevó los honores al lado de su copilota venezolana Ana Goñi, en tanto que el segundo sitio fue para Lars Stugemo y Jonny Olofsson.
México se tuvo que conformar con el tercer puesto logrado por los hermanos Alejandro y Mauricio Pimentel a bordo de un Dodge Coronet. La emoción estuvo al límite, cuando por un momento, tuvieron la opción de alcanzar la máxima gloria y coronarse campeones, pero un error en el tramo de la CDMX a Querétaro, abrió la puerta a Blomqvist para llevarse la victoria.
La dramática remontada de Eric Comas en la edición del 2014
Eric Comas es recordado por su paso en la Fórmula Uno. En el “Gran Circo”, este francés tomó parte en 63 Grandes Premios con es escuderías como Ligier y Larousse, siendo su mejor resultado el quinto puesto en el Gran Premio de Francia de 1992.
Recordemos que, desde sus inicios, la justa mexicana se caracterizó por recorrer el país de norte a sur, así como también en sentido inverso. Después, por solicitud de los gobiernos de los respectivos estados y por cuestiones de mercadotecnia, la Panamericana se vio modificada en su ruta y en la inclusión de diferentes etapas a lo largo de esta.
Eric Comas en 2014
En el 2014 el norte del país volvió a figurar en los planes de la competencia, teniendo de nueva cuenta a Veracruz como su punto de salida, para terminar las acciones en Durango. Las fechas la aventura quedaron estipuladas del 17 al 23 de octubre siendo la distancia pactada de nada menos que 3 mil 533 kilómetros.
En dicha ocasión, un Ford Coupé amarillo modelo 1954, impulsado por un motor V8 con más de 450 caballos de fuerza, fue llevado por los mexicanos Gabriel Pérez y Angélica Fuentes al primer puesto de La Carrera Panamericana.
El piloto francés Eric Comas, tuvo en México uno de los momentos más brillantes de su carrera: justo cuando se pronostica el triunfo de Emilio Velázquez, quien había arrancado con una cómoda ventaja en Zacatecas, un inesperado abandono, le abrió la puerta a una remontada sensacional en la séptima y última etapa al francés.
Y es que prácticamente desde el arranque de la competencia, se libró una batalla personal entre Eric Comas y Velázquez, con ocasionales destellos del también galo Hilaire Damiron y la navegante mexicana Liz Tejada.
Emilio Velázquez y su navegante Javier Marín, en el Studebaker 113 de la categoría Turismo Mayor, habían hecho una competencia impecable, pero en la cuarta jornada llegó el desastre. El motor de los mexicanos voló dando lugar a una de las imágenes más dramáticas de la historia, precisamente porque significaba que el título cambiaría de manos.
El abandono de Velázquez igualmente dio paso a que los imbatibles Doug Mockett y Angélica Fuentes llegaran en el segundo puesto, luego de sufrir durante toda la competencia con su Oldsmobile: “Tuvimos muchos problemas con la mecánica y también por el hecho de que es muy pesado. Pero al final logramos llegar a la meta”, dijo Angélica emocionada por el sorpresivo resultado.
Además del dramatismo de la inesperada remontada, Comas pasó a ser el primer piloto de Fórmula Uno que gana la Panamericana desde su renacimiento en 1988. Previamente esto sólo había sido logrado por los míticos Piero Taruffi (1951), Juan Manuel Fangio (1954) y Umberto Maglioli (1954).
Anécdotas y gratos recuerdos a través de estos 35 años, el amor por el automovilismo, la adrenalina en las cabinas, la emoción del público, el sabor de México. Todos estos factores alimentan el espíritu de La Carrera y lo mantienen latente en los corazones de los amantes de este apasionante deporte motor.
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